Un dia de ventanas. Asi resumido no parece gran cosa. Pero los paisajes que vimos en nuestro trayecto en tren desde Osaka a Kii-Katsuura a traves de las ventanas o las vistas desde la ventana de nuestro hotel quedaran permanentemente en nuestras retinas. Pues eso que iniciamos el dia en Osaka y teniamos una ventana de tiempo hasta que al mediodia saliera nuuestro tren hasta nuestro siguiente destino. Queria probar un sitio para desayunar proximo a la estacion de Tennoji, donde dejamos nuestras maletas en una taquilla y desde donde saldria nuestro tren. Cruzamos todo el parque de Tennoji donde se encuentra el zoo de la ciudad para llegar al otro barrio importante de la ciudad lleno de restaurantes y con la Tsutenkaku presidiendolo todo pero el sitio que buscabamos estaba cerrado, asi que tuvimos que improvisar. Hicimos como un loop por fuera del parque visitando diversos templos preciosos donde Darwin Lolita se convertia al budismo, no sin antes pegarse su chute de cafeina.
Fue en el Templo Idshinji donde Darwin Lolita se empeño en hacer una ofrenda que yo con gran maestria en la camara con un interesante plano fijo gracias a que nuestra amiga tardo mas de un minuto en encender el incienso, plasme en imagenes. Luego entramos en el majestuoso Shitennō-ji del que visitamos todos los rincones.
En la estacion nos preparamos el banquete que degustariamos en el tren camino a Katsuura. Tras la comilona y cansados de la caminata de la mañana se sucedian bellas imagenes por los cristales del tren que nosotros contemplabamos embelesados.
Katsuura es una pequeña ciudad pescadora donde su elemento protagonista es el Atun. Tras mirar cositas en la oficina de turismo justo a la salida de la estacion nos refrescamos un poco los pies antes de dirigirnos al lugar donde dormiriamos las siguientes dos noches. El Hotel Nagisaya a pesar de estar un pelin alejado del pueblo y dar tanto miedo como el hotel del resplandor, tenia unas vistas desde la ventana preciosas y un Onsen maravilloso al aire libre desde donde contemplabas el oceano. Antes de llegar tuvimos que demorarnos un rato porque Darwin Lolita volvio a las andadas con los pajaros a los que tuvimos que perseguir por todo el puerto mientras ella hacia sus pesquisas.
FInalizamos el dia en el Katsuragi comiendo un menu de atun cocinado de diferentes maneras. Un lugar autentico de comida autentica no apto para todos los paladares.
Me gustaría que otro Darwin me supiera decir qué rapaz es la que había a centenares en KiiKatsura. Me pareció sorprendente y no encontré nunguna mención al tema en ningún sitio…