50 años de Astral Weeks

Yo debería decir 23 años de Astral Weeks pero hace 50 que salió a la luz y aquí le rindo mi pequeño homenaje. Han sido muchas escuchas, muchas sensaciones y muchas vivencias con este disco. Pero una de ellas tiene especial repercusión. Este disco y este músico me llevaron de viaje a un lugar que desde que fui la primera vez he visitado recurrentemente. Y dentro de este viaje recurrente a Irlanda la imaginería Morrison ha tenido especial importancia.

La primera vez que fui fue en 1998 y aun no tengo el material gráfico para retratarlo pero fueron unos cuantos días entre Dublin, Galway y Belfast. Al llegar a esta ultima ciudad, acompañado esta vez por Georgia, hicimos el recorrido que a dia de hoy ya es un clásico. Ir hacia Hyndford Street, recorrer Orangfield, Bloomfield y llegar a Cypruss Avenue.

Luego volví con Neus en el 2004 repitiendo este mismo viaje y al igual que en el primero acabándolo en Londres. Aqui antes del recorrido clásico, en Dublin, nos acercamos a todos los posibles espacios Morrisonianos que se nos ocurrieron.

De Dublin fuimos a Galway y desde ahí en autobús a Belfast. No hay nada mas magico e increible que recorrer Irlanda desde Galway a Belfast, pasando por Sligo y Donegal, mientras escuchas el Astral Weeks. Es
alli realmente donde las canciones encajan a la perfeccion, donde se nota esa imagineria morrisoniana en estado puro. La musica se me antojaba mas real, mas lucida, mas tactil. Si dejaba volar mi mente podía aprehender el entorno, y me veía rodeado del flechas, de Little Jimmy y de niñas
montadas en carruajes custodiados por procesiones…..La llegada a Belfast no hizo mas que confirmarme esos sentimientos…Ulster Hall, Grand opera House, el Waterfront donde me cole para lanzar unas fotos del
escenario….y desde donde inicie mi periplo morrisoniano. La primera sorpresa fue ver cómo al rio Beechie le habían cambiado el nombre desde la ultima vez que estuve allí. Coño ahora era el rio Lagan. Pues
bien cruzamos el rio para dejar la zona catolica e
internarnos en la protestante. Realmente es algo digno
de verse la multitud de murales sobre los caidos,
sobre los terroristas, unionistas y demas….Son de
una belleza plastica hiriente porque percibes en ellos
el dolor, la ira, el miedo…..

Bueno en esta que
llegamos a Hyndford street. Casas de ladrillos
uniformes y con sus terracitas donde nacio nuestro
gordito amigo. Callejones, basura, rojo,
cuadrangular,industria…Es necesario ver esa zona y
luego cruzar por Bloomfield para llegar a Cypruss
avenue y Orangfield para entender la cancion en su
totalidad. Es asombroso como en tan pocos metros que
separan los dos sitios haya tanto cambio…Sol, verde,
tranquilidad, serpenteante….

El gordo decia que Cypruss avenue es donde podia sentarse a pensar. Era un mundo completamente distinto al que estaba
acostumbrado y le gustaba pasarse horas alli sentado
imaginando a doncellas con el pelo cual arco iris
resplandeciente, sintiendo crecer en el un amor
intenso, por el entorno, por un lugar que nunca le
abandonaria, y yo sentado alli me encontre atrapado
otra vez más en la calle del ciprés. Una calle en la
que se inicia ese Madame George, que tras haber estado
allí se me aparece como totalmente ficticio. Es ahora
cuando realmente veo como la cancion es un conjunto de
retazos que se desprenden de la mente de Morrison. Una
cancion que pasa por retratar Belfast city en los ojos
de un niño. Ese cypruss avenue, ese personaje que es
Madame George, esa estacion de trenes a la que se
dirije pasando por Sandy Row, reducto protestante
dentro de la zona catolica, los soldados….Pero tras
hacer la ruta te das cuenta que progreso lineal de los
hechos es imposible por la distancia y por el
entorno.Madame George nunca bajaría por Cypruss Avenue
y nunca hasta Sandy Row, al menos andando.Pero me da
igual, como los cuentos moralizantes de Capra es algo
en lo que has de creer y punto.
Y yo desde hace mucho tiempo que creo en Van Morrison.

Y volví a la calle del ciprés en el 2018 con Lola. Y esta vez hicimos el recorrido de manera oficial ya que es un recorrido recogido en la oficina de turismo y ya indicado incluso en las calles. Como St. Donnars Church o los pilones.