Out On The Weekend (Costa Brava 2023)

Y salimos el fin de semana y que mejor que titularlo con este tema de Neil Young, presente en nuestras disertaciones del fin de semana. Teniamos concierto en Cap Roig y preparamos un finde de relax, comida y musica. El relax fue a medias pues un fin de semana con Lolita al volante muy tranquilo no es. La musica a medias tambien porque el concierto de Damien Rice fue mas flojo de lo normal. Pero amigos la comida nunca falla… Salimos de Barcelona camino de Colomers, un pueblecito de la zona, donde teniamos reserva para comer. Como siempre empezamos con el flirteo de Lolita con el coche, durante ese proceso de seduccion, Lolita intenta apoderarse del dominio del coche mientras este le jode la marrana en formas varias, fallando en la introduccion de las marchas, calando el coche, intentando averiguar el gasto de gasolina hasta que finalmente aparcamos, Lolita’s Way, en el pueblo de marras. Con un sol de justicia y mientras esperamos que llegue la hora de la comida nos metemos en un garito con unas mesitas a la sombra donde nos ponen unas olivitas y un par de coca colas. A medio camino de irlas a buscar el tipo nos suelta que es fritz cola y claro no le vas a decir que pasas de eso, porque entre la sed y la pena de quitarle la ilusion al majadero te conformas. Pero mi cara reflejaba la furia del momento ,mientras Lolita se congratulaba en venganza por mis gritos en el coche. Putos modernillos alternativos y ecologicos….

El restaurante, El Cargolet, recomendacion de uno de sus compañeros de trabajo (mal vamos) al final no estuvo mal, aunque solo fuera por sus buenisimos caracoles. Nunca habia comido los caracoles braseados y hay que decir que estaban para chuparse los dedos que es precisamente lo que hice. Lolita intentando mantener su dieta se descuelga con una ensalada de burrata y de segundo nos compartimos un arroz con calamares y gambas de Palamos. El primer bocado bueno, al tercero se hacia tedioso.

La entrada a Llafranch donde teniamos nuestro hotel fue una sucesion de momentos estelares de Lolita a la conduccion. La ciudad hostil como ella misma se empeñaba en presentarnos calles asfaltadas de la peor manera posible, el coche en seguia martirizando a Lolita y descolgaba algo en los bajos que iba rozando a cada bache que encontrabamos, mientras Lolita se erizaba a cada rascada y se ponia como loca porque la gente en la calle nos miraba por el ruido. Yo como no soy nada flexible y encima llevaba el cinturon de seguridad no podia meterme debajo del asiento por la verguenza, pero lo intente. La habitacion en el hotel cambio el animo de nuestra intrepida conductora. Cada vista en el la congraciaba con la vida, desde la habitacion, desde la piscina, todo eran ahh y ohhh. Enseguida estaba retozando en el agua de la piscina, mientras yo me las veia putas para meterme dentro. Finalmente la tension del coche y mi lucha en el agua pudo conmigo y cai rendido en la hamaca mientras Lola se gustaba y se hacia fotos a lo starlett.

Recuperado tras la siesta hicimos el salto del tigre en la habitacion para coger hambre pues teniamos mesa reservado en el Nome que esta al lado del Faro de Sant Sebastia. La luz y las vistas nos permitieron hacer fotos preciosas en los aledaños del restaurante entre arboledas y antiguos poblados ibericos.

El menu degustacion del Nomo, rico, pero sin tirar cohetes. Conocemos bien su carta y no hubo nada que nos llamara especialmente la atencion. Hasta que llego el postre que era de traca i mocador. Los platos en orden de aparicion fueron: Edamame frito al aroma de trufa blanca, croqueta japonesa de rabo de toro rebozada con panko, Mini taco de tartar de atún, hoja de wasabi marinada y shiso, sobre una oblea artesanal hecha con plancton marino, Empanadillas de vaca vieja con cebolla caramelizada y
crema de yuzu, Langostinos picantes sobre base de fideos kataifi crujientes y huevo frito, Nigiri de salmón de Noruega flambeado con mayonesa japonesa, huevas de salmón y cebolla perla, Nigiri de tataki de atún marinado con soja, salsa crema de trufa negra, Nigiri de pez mantequilla con salsa kimuchi y piparras en vinagre, Nigiri de brie flambeado con miel y nueces, Temaki de tartar de ventresca de atún con cebolla tierna japonesa, nabo marinado, piparras, yema de huevo y hoja de wasabi marinado, Tataki de vaca con setas confitadas y salsa de miso y el postre Panna Cotta de taro con helado de yogur y crumble de piña.

Y llegamos a Cap Roig el motivo principal de nuestro viaje. Pijerio por doquier como siempre y una audiencia entregada al irlandes que rajo de las relaciones sentimentales como siempre, se trajo a la sustituta de Lisa Harrigan y posiblmente la proxima protagonista de sus canciones y para acabarlo de redondear subio al escenario a Silvia Perez Cruz que estuvo muy bien en un tema de su propia cosecha y menos cuando cantaba las canciones de Rice. A este le ha hecho mella la inactividad y la edad, montando un concierto de funcionario, sin aspavientos y contenido. La prueba de lo que os digo os la dejo aqui con tres versiones distintas del tema I Remember, juzgar por vosotros mismos, pero ya sabeis que yo nunca me equivoco.

A la mañana siguiente Lola seguia on fire con la piscina y las vistas, asi que prontito se planto fuera mientras yo me abrazaba a mi almohada. Dijimos adios al paraiso terrenal de Lolita, el Hotel Blaumar, y nos acercamos a Navata para ver a una pareja de amigos con la que ibamos a comer. Gente amable, culta y divertida y seguidores de mi blog, lo tienen todo. Tras unas horas de charla sobre el placer de la contemplacion y de las relaciones humanos y tras haberseles puesto los pelos como escarpias al ver a Lolita aparcando el coche y de una buena comida en el Bar Sindicat que olvide documentar, podemos asegurar que Susana no cree en el wu wei (principio de no accion) de Lao Tse sino en que la vida es movimiento y ciclismo aunque estemos a 38 grados.

El domingo me toco trabajar pero el dia se arreglo porque fuimos a probar un nuevo japones en Barcelona. El Ah-un, restaurante de yakiniku que nos devolvio a las calles de Tacayama y al sabor de la carne al mas puro estilo japones. Esta vez carne de Miyazaki, que no nos parecio tan buena como la de Hida y Kobe pero en algunos de sus cortes se subia al podio.