The Castle IX (Japon 2023)

Ultimo dia en Osaka que aprovechamos para pasear tranquilamente, seguir comiendo y visitar algunas cosillas que nos faltaban. Salimos a la calle buscando un sitio para desayunar y mira que fue dificil por dios. Al final entramos en una cafeteria donde disfrutamos de un buen desayuno y eso que no tenia muy buena pinta. Los pankekes estaban deliciosos, el matcha no tanto. Lo que se hizo extraño es comer con olor a tabaco porque ahi en Japon hay muchos sitios donde aun no esta prohibido fumar en locales.

La intecion era ver el castillo de Osaka y para alla que nos fuimos. Hicimos antes una parada en el Santuario Tenmangu, donde no paraban de llegar invitados en taxi para una boda que alli se celebraba y todos discapacitados, ancianos..que llegaban en taxi. Seguimos en ruta hasta llegar al bonito parque donde se ubica el castillo de la ciudad. Una preciosidad que nos recordo un monton a Himeji y que debido a esto y la interminable cola apostada con un calor tremendo para entrar en el nos hizo decidir que no valia la pena entrar. Fuimos a ver una tienda de discos camino de Dotombori, donde nuevo buscariamos un sitios para comer. Un lugar de sushi que vimos la noche anterior que tenia bastante exito. Un Running Sushi en el que nos pusimos tibios, Genrokuzushi Dotombori.

Como seguiamos con hambre nos acercamos a uno de los puestos de Takoyaki que recomendaba la Planet, Takoyaki Wanaka Namba, y nos pillamos una cajita que nos comimos sentados en la calle. Mientras haciamos tiempo para la ceremonia del te que habiamos reservado nos acercamos a American Mura un barrio de ropa vintage o de influencia americana, llena de musicos callejeros que contemplamos sentados en unas escaleras. Eran tan malo que me entro hambre otra vez asi que buscamos un sitios cerca y me vino de gusto una hamburguesa del Shogun Burguer, que me comi mientras Lolita me miraba como si estuviera loco.

Seguimos dando vueltas y nos acercamos al Osaka Ukiyoe Museum. Fue una sugerencia de Lolita por llamarlo de alguna manera. Ella tiene una forma muy peculiar de hacer sugerencias. Por ejemplo estas en la otra punta de la ciudad y te dice te parece bien que vayamos al Osaka Ukiyoe Museum antes de la ceremonia?. Espera que lo miro a ver si lo podemos cuadrar. En los 10 siguientes minutos mientras tu miras y le ofreces pros y contras ella te ha dicho 30 veces de manera distinta y sin parar de hablar que hemos de ir al Osaka Ukiyoe Museum. El museo resulto interesante asi como la obra de este pintor que yo desconocia, gracias Lolita. Al irnos Lola sugirio que me comprara una camiseta de uno de los cuadros. A pesar de mis reticencias y el precio elevado a los 2o minutos saliamos del museo com la camiseta bajo el brazo y una sonrisa de satisfacion en la cara de ella. La ceremonia nos la hizo un joven japones con su pupilo y que no valia lo que costaba pero si que la frikada fue interesante y lo disfrutamos.

Paseo de vuelta al hotel y salida a cenar con todo lleno o a punto de cerrar. Cuando la frustacion y el hambre se apoderaban de mi finalmente encontramos el Yakiniku Douraku donde nos pegamos nuestro ultimo festival de carne.