Desde nuestro viaje a Irlanda en el 2018, una pequeña escapada a Belfast de pocos dias, Lolita estaba ansiosa por hacer un tour por los highlights de la isla. Asi que monte un viaje donde enseñarle cosas que yo habia visto y donde poder yo hacer cosas nuevas. El tema se torcio desde el principio porque la idea era hacer toda la Atlantic Coast en coche e ir visitando sitios. El prohibitivo alquiler de los coches nos hizo variar algo el itinerario al tener que hacerlo todo con transporte publico. El resultado fueron 14 dias maravillosos en mi tierra de adopcion. Como no podia ser de otra forma empezamos por Belfast, ya que nuestra previa visita habia sido predominantemente nocturna. Llegamos y nuestro hotel, El Maldron, estaba en las inmediaciones de un clasico de la ciudad el Crown Liquor Saloon. Tras hacer el check-in nos acercamos al City Hall que tenia una feria de comida en su jardin y como ya teniamos hambre nos pillamos una salchicha polaca, que nos comimos mientras visitabamos los tenderetes.
Con el estomago lleno nos dimos una primera vuelta por la ciudad, llena esta vez de art de juego de tronos y exposiciones de fotografia callejera. Un edificio estilo el Flatiron de Nueva York, Funghi uno de los emblemas de la ciudad, el muelle….
Era hora de parar a comer y lleve a Lola a otro de los clasicos de Belfast. El White Tavern, un pub de 1610, acogedor y oscuro, donde he repetido siempre desde que lo conoci por alla el 2008…
Tocaba descansar un rato ya que nos habiamos levantado sobre las 4 de la mañana, asi que fuimos a echar una cabezadita al hotel, ya que a primer hora de la tarde habiamos cogido entradas para el museo del Titanic. Fuimos andando desde el Hotel que era un buen cachito hasta que devisamos el peculiar edificio que alberga el museo. Este, muy interesante a pesar de nos ser especialmente seguidores del historico suceso. Lo mejor del museo, lleno de informacion y merchandising, es una atraccion interactiva en la que te montas en una especia asiento como si estuvieras en una noria y te va llevando a traves de los astilleros del puerto en medio del ruido de metal y los humos y el sudor de la mano de obra, para que observes de primera mano, lo grande que eran esos barcos y los herculeo de su contruccion.
Desde alli se venia el plato fuerte del dia. The Van Morrison Trail. Cruzamos el rio y nos dirigimos hacia el East Belfast, entre parques y murales. Hasta que llegamos a Cypruss Avenue, donde como marcan los canones nos sentamos a escuchar un rato el Astral Weeks que nos acompaño el resto de la ruta, pasando por Hyndford Street, St. Donnard’s Church y Orangfield.
De vuelta, siempre andando, nos dirigimos a un hindu, Archana, recomendado en la Planet, que estaba cerca del hotel y que era correcto, con unas porciones (al menos los platos) gigantes. Como siempre el Tikka Massala no podia faltar.
