Y amanece el tercer día y cogemos el coche para hacer ruta. La dirección: Lucca. Aparcamos el coche y entramos por la puerta de Santa Maria. Lucca es una ciudad amurallada, aunque sus murallas no sirvieran nunca como baluarte defensivo, sino algo mas bien estético.
Es una ciudad bonita sin mas. Al llegar hacia frio y aprovechamos para tomarnos un chocolate caliente en un bar al lado de la Chiesa di San Frediano, una iglesia del S.XII. Tengo bastantes fotos de los interiores de las iglesias pero he decidido no ponerlas para que el diario sea mas ameno.
Seguimos deambulando por la ciudad y llegamos a otra plaza enorme de estas italianas que nos gustan tanto. La Piazza de San Michele con su Chiesa di San Michele in Foro
Seguimos el trayecto hacia la Piazza del Giglio para llegar por la Via Duomo al Duomo di San Martino.
De vuelta hacia el coche nos paramos en otra estupenda plaza, Piazza dell’Anfiteatro no sin antes echarle un ojo a lo lejos a la Torre Guinigui. En resumen un bonita ciudad para darse una vuelta.
Así que de nuevo en el coche en dirección a Siena. Al llegar tocaba comer y es lo primero que hicimos en la Osteria del Gusto. Para empezar Crostone Lampredotto y. luego una bistecca a la Fiorentina. Tiramisu de postre como no. La bistecca estaba tremenda.
Y empezamos la visita. El duomo era obligado asi como la Piazza del Campo. Nos cogimos un multi ticket para poder visitarlo todo: duomo, baptisterio, la puerta del cielo, la cripta. El duomo es majestuoso y brutal con obras de Donatello y otros ilustres maestros. Especialmente nos gusto la Librería Piccolomini decorada con frescos y llena de libros antiguos. Finalizamos la visita subiendo arriba del Duomo para tener vistas tanto interiores como exteriores, algunas de ellas realmente sugerentes gracias a la niebla que se había levantado.
De vuelta a La Spezia estábamos cansados así que nos pedimos unas pizzas para llevar y nos las comimos en el hotel. Decir que las pizzas eran realmente malas.
Hemos ido un poco al ras con los horarios (sobretodo a mediodía…) y hubo días que estuvimos a punto de no comer así que ojito con apurar mucho…
Por lo demás ya tenemos excusa para volver a Italia a por una pizza decente. Dios, qué mala estaba….