Otro estupendo japonés en Barcelona. Caro como todo lo bueno pero muy disfrutable. Y por fin otro lugar donde comer okonomiyaki tras la desaparición de mi querido Ikkiu.
Pues que quereis que os diga...Hare un resumen de los epítetos mas usados por mis admiradores: intolerante, prepotente, salido, antisocial, borde, frio...Pero quien se iba a creer a esa panda de descerebrados...